martes, 26 de abril de 2011

Guía práctica para instalarse en Bali

Algo ambicioso me ha quedado este título y no sé si sabré llenar este post de suficiente contundencia como para poder llamarle "guía"... pero a ello me dispongo. Ahora que se aproxima el fin de nuestra aventura (volvemos a España a finales de mayo) espero poder transmitir algo de lo que he aprendido a otros aventureros que se animen a emprender esta pequeña locura. Ahí van algunos consejos:

- Al llegar tómatelo con calma: si buscas alojamiento para el "desembarco", que sea para dos semanas o más, para que no tengas que buscar tu casa a la carrera. Las cosas en Bali van muy despacio y encontrar casa lleva su tiempo, así que mejor hacerlo con las espaldas cubiertas. Mejor alojarse en un apartamento con cocina que en un hotel, y mejor en una zona céntrica que apartada.

- Consigue cuanto antes tu propio transporte y hazte con un buen mapa de Bali el primer día: venden una especie de callejero muy completo que es más caro que el clásico mapa turístico pero es una buena inversión. Olvídate de los innumerables conductores que te ofrecen "transport" sin parar y alquila tu propio coche o moto. Te acostumbrarás rápido a conducir por la izquierda y sin ley, y verás la vida de otra manera cuando puedas moverte de forma independiente.

Pregunta a otros expatriados: a los que vivimos en Bali nos encanta que nos pregunten, y la mayoría tenemos tiempo de contestar. Todos los que aquí estamos hemos pasado por el trance de llegar e instalarnos, y sabemos que puede ser muy complicado y frustrante al principio. Preguntar a los locales no es una buena opción, porque ellos no tienen las mismas necesidades que nosotros y, tratando de ayudarte, van a hacer que des dos mil quinientas vueltas. Si por ejemplo quieres contratar internet para tu nueva casa y le preguntas a un indonesio cómo hacerlo, seguramente te dirá que ningún problema, que él tiene un amigo que te lo hace... por un módico precio claro. Y el problema no es sólo que te saquen los cuartos, sino que te retrasarán y seguramente no será la conexión que buscabas ni el servicio adecuado. Si le preguntas al taxista si sabe de alguna casa de alquiler te llevará con toda seguridad a ver una, pero será la casa de su tía abuela que no estará en la zona que quieres ni tendrá las comodidades que tú necesitas. Los mejores contactos, teléfonos o consejos que he conseguido desde que estoy aquí no han venido de balineses sino de otros expatriados que llevaban en Bali más tiempo que yo. No seas tímido, preguntar puede servirte también para conocer gente!

- Busca el "Bali Advertiser": es el periódico de cabecera de los expats en Bali, y allí encontrarás anuncios de casas en alquiler, artículos de segunda mano, ofertas de empleo, coches, etc... Nosotros encontramos la casa en la que vivimos a través de éste periódico. Es gratuito y lo puedes encontrar en muchos restaurantes y locales a lo largo de toda la isla. También están en internet: www.baliadvertiser.biz

- Abre una cuenta bancaria: teóricamente si no están en posesión de una KITAS (Visa con permiso de trabajo) no es posible hacerlo, pero en Bali la teoría es muy distinta de la práctica. Nosotros abrimos una cuenta en Permata Bank sólo con una VISA Social gracias a una recomendación del abogado que se iba a encargar de gestionar la extensión de nuestros visados. Si un buen cliente del banco te recomienda o "esponsoriza" puedes tener tu cuenta en Bali y ahorrarte mucho dinero en comisiones.

- Ojo al cambio: cambia sólo en establecimientos oficiales y fíjate que el cambio esté libre de comisión y actualizado. Olvídate de cambiar en el aeropuerto o en los hoteles porque perderás dinero. El cambio entre euro y rupia indonesia fluctúa bastante, así que tenlo el cuenta a la hora de cambiar cantidades importantes como el pago anual de la casa, por ejemplo.

- Antes de mudarte a una casa, vívela: si encuentras una casa que te guste y una vez negociado el precio y las condiciones quieres quedártela... respira hondo y dá un paso atrás. Dile al propietario que aún no estás convencido del todo (aunque te mueras de ganas de mudarte y estés loco de emoción) y que necesitas pasar una noche en la casa para estar seguro. Te parecerá una tontería, pero es importante: haciéndolo sabrás si la casa está o no iluminada por la noche, si el agua caliente sale de verdad caliente, si funcionan todos los aires acondicionados a la vez o si se va la luz cuando los enciendes, si necesitas más armarios, los ruidos que se oyen por la noche y al amanecer... Y si el propietario te asegura que va a arreglar ésto o aquello una vez que te mudes.... No te fíes. Que lo arregle primero y pagas después. Regatea sin tapujos, piensa que en Bali el sueldo de un funcionario es de un millón de rupias mensuales. Así que los noventa o cien millones que se pagan por un año de alquiler son una auténtica fortuna aquí.

- Contrata tu propio personal: hay muchas villas que se ofrecen con chofer o asistenta "incluida". No te comprometas a pagar un sueldo a un empleado que tú no has elegido ni contratado. Si después resulta que es un auténtico desastre te verás obligado a seguir pagando a alguien cuyo trabajo no te satisface.

- Olvídate de los euros lo antes posible: no hagas el cambio a euros cada vez que te den el precio de algo. Al principio será inevitable, pero enseguida podrás "pensar en rupias". Y es mucho mejor si quieres evitar que te den gato por liebre. Los precios para los "bulés" (o sea, los blancos) pueden ser desorbitados a veces, pero si los traduces a euros pensarás que no es para tanto: por ejemplo, paseíto en barco típico (media hora) por 400.000 Rp. ¡es una locura! Pero si piensas que son unos 30€ no te parecerá tan mal. No lo hagas: un paseíto en barca de media hora no debería costar más de 150.000 Rp y no importa cuántos euros sean.

Aprende indonesio: al menos los números, los días de la semana, algunos verbos y construcciones básicas... Cambia completamente la visión que de tí tienen los locales cuando eres capaz de hablarles en su lengua. Dirígete a los señores por "Pak" y a ellas por "Ibu". Saluda con "Apakabar" y dí "Terimakasi".

lunes, 11 de abril de 2011

Algunas cosas que he aprendido en Bali

- Que el arroz combina bien con las cosas más insospechadas: arroz con lentejas, arroz con tortilla de patatas, arroz con aguacate...

- Que se puede vivir sin tele, pero no sin Internet.

- Que está el xirimiri, el orvallo, el calabobos, los chuzos de punta, el "raining cats and dogs" de los ingleses, las lluvias torrenciales... y luego está la lluvia de Bali que supera, con mucho, a todo lo anterior. Si no has vivido una "Rainy season" en Bali no has visto llover de verdad.

- A diferenciar las ranas de los sapos.

- Que en una moto se puede llevar un almacén entero de felpudos, dos teles, tres niños y dos adultos, un puesto ambulante de comida, una mudanza... lo que sea!

- Que cuando hay una tormenta eléctrica hay que apagar el Router si no quieres que lo fría un rayo.

- Que se puede vivir sin chorizo, pero no sin aceite de oliva.

- A cocinar un marmitako buenísimo, gracias a mi amiga Anahí, que nos lo preparó en Nochevieja. Un guisito muy poco apropiado para los calores de Bali, pero que nos supo a gloria.

- Que los Gekos se llaman así porque al atardecer emiten un sonido que dice: GE-KO, GE-KO

- Que el glutamato es una sustancia que los orientales añaden a la comida para mejorar su sabor y que, además de aumentar el apetito, tiene unos efectos secundarios bastante nocivos para el organismo.

- A ponerme el pareo con estilo, y a tener sólo un calzado: las hawaianas.

- Que cualquier español vende su alma por una tortilla de patatas.

- Que los ratones saben nadar, y subir escaleras.

- Que los gatos son adorables cuando llegas a conocerlos.

- Algo de indonesio, pero no lo suficiente.

- Que la Navidad es aún más deprimente cuando se está lejos de la familia.

- A dejar los zapatos en la entrada y andar descalza por la casa.

... y lo que se me queda en el tintero